La del 22 de mayo de 2017 será una fecha que muchos no podrán olvidar jamás. El atentado perpetrado en Manchester al terminar el concierto de Ariana Grande es uno de los ataques terroristas más crueles que hemos vivido en occidente, un ataque que dejó un total de 22 víctimas mortales y decenas de heridos. Pasados los meses se ha desvelado que la cantante sufrió un trauma tras lo ocurrido y su mánager ha revelado lo duros que fueron los días después de la tragedia para Ariana.
Scooter Braun, representante de Justin Bieber y Cruz Beckham, entre otros, ha participado en el podcast The Big Questions with Cal Fussman y ha respondido todas las preguntas que se le han hecho sobre el ataque terrorista de Manchester.
Tal y como explica Braun en referencia a Ariana Grande, “cuando descubrió que algunos de sus fans habían muerto se sintió muy triste. Estuvo llorando durante días. Ella sintió todo, cada nombre, cada cara que anunciaban... Cada pequeña emoción, porque así es como es ella”.
Scooter Braun ha confesado que Ariana Grande sufrió un trauma tan grande con el atentado de Manchester que no sabía si sería capaz de volver a cantar sus canciones de nuevo. Por eso, y como primera medida, el mánager comenzó a cancelar las fechas del tour Dangerous Woman hasta que la propia Ariana le pidió que no lo hiciera.
La artista le dijo que quería hacer algo para rendir tributo a las víctimas y para que sus muertes no hubiesen sido “en vano”. Ahí surgió la idea del concierto One Love Manchester que reunió a artistas como Justin Bieber, Miley Cyrus, Coldplay, Robbie Williams, Liam Gallagher, Katy Perry, Black Eyed Peas o Take That, entre otros, para recaudar fondos para las víctimas del ataque.
Más de 50.000 personas acudieron al show y el concierto fue seguido por millones de personas en internet. “La estrella del show, en mi opinión, además de Ariana, fue el público”, afirmó Braun en su entrevista. “Los terroristas cometieron un error... eligieron el show equivocado, porque si pensaban que nos iban a derribar es que no conocen a Ariana y es que no me conocen a mí”, sentenció.
Pero lo peor aún estaba por llegar. Ariana Grande quiso visitar a las familias de las víctimas y a los heridos del ataque, y aquel fue sin duda uno de los momentos más duros de su vida. “Fueron las dos horas más duras de nuestra vida”, asegura su mánager. “Después de conocer a la primera familia tuve que ayudarla porque estaba muy inquieta y yo estaba perdido”, añadió.
“Fue más que duro. Pero cada vez que nos veníamos abajo recordábamos que nosotros volveríamos a casa y que aquellos a los que queremos estarían allí. Aquella madre nunca volvería a casa, aquella hija tampoco regresaría, ni aquel hijo ni aquel padre. No teníamos derecho a estar tan tristes como para no continuar”, ha revelado el mánager de Ariana Grande.
Fuente: EOnline.
