Kendall Jenner protagonizó hace poco una campaña para Calvin Klein y cuando se publicó comenzó la polémica en varias partes del mundo.
Según Carla Majdalani, la directora de Comunicación del Consejo Nacional de las Mujeres, la reproducción de esa publicidad se enmarca dentro de lo que se denominaría “violencia mediática”.
Según la ley, quiere decir que es: “aquella publicación o difusión de mensajes e imágenes estereotipados a través de cualquier medio masivo de comunicación, que de manera directa o indirecta promueva la explotación de mujeres o sus imágenes, injurie, difame, discrimine, deshonre, humille o atente contra la dignidad de las mujeres…”.
El lema de la campaña es “I am strong in #mycalvins” y Kendall busca deshacerse de tres hombres que forcejean e intentan atraparla. Pero la pregunta polémica es: ¿por qué buscan controlarla?
Para dar respuesta a ese interrogante, el presidente de la organización Stop Maltrato, Juan Miguel Moreno, recalcó que “la imagen es violencia en sí misma.
El hecho de que dos hombres peleen por una mujer, como si esta fuera un artículo de colección es un insulto al sexo femenino, pero también al masculino”.